Liberalismo

Podemos definir al liberalismo como una filosofía política que defiende la libertad individual, la iniciativa privada, la igualdad ante la ley y limita la intervención del Estado y de los poderes públicos en la vida social, económica y cultural. El economista argentino Alberto Benegas Lynch sintetiza toda la filosofia liberal en una sola frase: “El liberalismo es el respeto irrestricto del proyecto de vida del projimo”. Resumiendo, propone que ni el Estado ni nadie pueden inmiscuirse en vida ajena, simple y sencillo. Esta filosofia se basa principalmente en los tres siguientes puntos:

A)    Los seres humanos somos seres racionales y todos poseemos tres derechos naturales (John Locke): derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad privada.

B)    El poder del Gobierno surge siempre de la voluntad de los individuos integrantes de la sociedad (voluntad popular). Este Gobierno solo tiene facultades para regular y legislar solamente sobre la esfera publica y nunca intervenir en la vida privada de las personas.

C)    El Estado de Derecho impide el ejercicio arbitrario del poder, obligando a todos los gobernantes a respetar de manera ferrea las reglas y leyes.

Al afirmar que todos los seres humanos somos seres racionales, el liberalismo defiende las decisiones que cada uno de nosotros como individuos tomamos, ya que, al ser racionales cada quien sabe que es lo que mas le conviene. Entonces, la doctrina liberal propone un alto grado de libertad para tomar decisiones y dirigir cada quien su vida de la manera que prefiera, siempre y cuando estas decisiones no interfieran con las decisiones y derechos de los demas integrantes de la sociedad. 

El liberalismo acepta la idea de que no existe un objetivo en comun que todos deben compartir, porque los humanos tenemos intereses, aspiraciones y fines distintos del resto de las personas. Entonces, si tus necesidades y aspiraciones no las comparten los demas, tus decisiones no tienen porque estar condicionadas a los intereses de los otros, o que estas decisiones tengan que beneficiar a la sociedad de manera obligatoria; el beneficiar al resto de la sociedad solo puede ser un acto voluntario y no un acto coaccionado, ya que el único fin del inviduo es su propio bienestar, la busqueda de su propia felicidad.  

Si nos inmiscuimos en el tema de valores, el liberalismo es radical. Ya que implica una tolerancia, respeto y responsabilidad radicales. Porque radicales? Porque la tolerancia es una actitud que respeta las opiniones, ideas o actitudes de las demás personas aunque no coincidan con las propias (no necesariamente respetar el contenido de la idea, pero si su existencia), y si solo toleramos a quien nos parece mejor o a aquel que comparta nuestras ideas simplemente no es tolerancia, es concordancia. Hablando del respeto, este tiene que ser radical ya que todos somos seres humanos con dignidad y merecemos ser tratados asi. Tenemos que ser responsables con absolutamente todos nuestros actos. Seamos conscientes que las acciones tienen consecuencias y las tenemos que asumir con responsabilidad, ya que son fruto de nuestros actos. Todos estos valores son la base para construir una verdadera sociedad; y la libertad, agrupa a todos los valores anteriores.

Y ahora la pregunta es : Porque en el mundo de la politica y la filosofia el liberalismo no es la ideología reinante? Pues por un concepto muy sencillo, explicado por el Psicologo social Erich Fromm: el miedo a la libertad.  “Pero si a todos nos gusta la libertad”, “nadie tiene miedo, mas bien todos queremos ser libres”. Seguro estas frases pasan por la cabeza de muchos que leen la frase de Erich Fromm. Pero es que, efectivamente, el ser humano tiene miedo a la libertad. No necesariamente a la libertad en si, sino a la responsabilidad que conlleva el ser independiente; y como ya vimos en otro parrafo, la libertad es responsabilidad. En el proceso de volvernos libres de la autoridad, los humanos quedamos con sentimientos de vacio (comparemos esto al proceso de independizacion de un niño como parte de su desarrollo) que no desaparecerán hasta que empecemos, cada ser humano a ser nuestro propio amo, y desarrollemos un reemplazo para el orden que conocíamos antes. Sin embargo, un sustituto común para esta autonomia es someternos a un sistema autoritario que reemplace el orden natural con una sola funcion sobre el individuo y la sociedad: eliminar la incertidumbre prescribiendo qué pensar y cómo actuar. El liberalismo queda atrás muchas veces porque preferimos quedarnos comodos en nuestros asientos a la espera de ordenes en vez de ser nosotros los que veamos lo mejor para nosotros mismos.  

Esto culmina en un paternalismo que hace que pensemos que todo lo bueno o malo a nuestro alrededor es producto de la mano del Estado. Cuando logramos el éxito, creemos que es gracias a las politicas benevolentes del gobierno de turno. O  cuando fracasamos, terminamos culpando al Estado incluso por la lluvia que arruina nuestros cultivos.

El liberalismo es todo lo contrario a este paternalismo, mas bien afirma que gracias a la no intervencion del Estado en los asuntos privados, las necesidades y se desarrollarian en el orden natural de manera satisfactoria y mas eficiente. Si el Estado no controlara todo, no se veria por ejemplo: desplazamientos de capitales o de poblacion provocados por medidas legislativas estatistas, desplazamientos que ocasionan catastrofes economicas y sociales tan profundas que terminan agravando en una medida tan grande la responsabilidad de los gobiernos.

Y ahora, aparte de toda ideologia,  nosotros los liberales no pretendemos imponer una receta mágica que solucione todos los problemas en la sociedad, porque tal receta no existe.  Los liberales creemos que ante todo, el ser humano va primero y este tiene que ser digno, y la verdadera dignidad es ser capaz de pararse sobre sus propios pies sin depender de nadie y sin temor a equivocarse poder decir: soy libre.